No odio porque ya descubrí que no tiene caso. Al final, lo único que puedo hacer con mi odio es guardármelo y dejar que me queme toda la garganta, porque tampoco me atrevería a gritarlo. Y no es que me falten agallas, siempre grito y no me importa, pero me faltan ganas de escucharme. También creo que no merezco odiarte, al final no eres una mala persona, sólo no supiste ser bueno conmigo, pero lo eres con el resto. Y por eso ya no te odio, tal vez nunca te odié.
Pero tampoco te quiero en mi vida, así que deja de aparecerte en la espuma de mi cappuccino.
Osh, cómo odio la espuma del cappuccino. Siempre se me aparece en el rostro de la gente.
ResponderEliminarY en los comales, DON'T MESS WITH COMALES, PEOPLE.
ResponderEliminarSolo no supiste ser bueno conmigo.
ResponderEliminarMe llegó :'(